4ª. Semana
En esta semana vamos a acostumbrarnos a dar gracias por todo lo bueno que nos llega y bendecir lo que creemos que es malo.
Al despertarte da gracias por este nuevo día. Tómate un momento para ver todas las bendiciones que tienes. Salud, tu familia, una casa, alimentos, agua, trabajo, etc.
Cuando te pongas los zapatos, da gracias por ellos, cuando te vistas, da gracias, en cada acción del día da gracias por todo lo que utilizas y que ha llegado a ti para un fin. En el momento que te acuerdes, da gracias. Así tomaremos conciencia de todo lo bueno que nos llega en un día. De que poseemos muchas cosas que nos ayudan a que nuestra vida sea agradable.
Si por alguna razón te llega algún contratiempo, bendícelo y pide ver qué tienes que aprender de esa situación. Da gracias por la iluminación que te llegue.
Por lo general, si estamos en armonía, no nos llegan cosas negativas, así es que procura siempre mantener el estado de ánimo alegre y positivo.
Al ir a dormir, agradece a Dios nuevamente por todos los beneficios recibidos ese día.
El primer día que hagas este ejercicio, procura hacerlo constantemente. Muchas veces ya estamos acostumbrados a las cosas y no nos maravillamos de que nos llegan. Al dar gracias empezamos a tomar conciencia de que hay muchas y abundantes cosas bellas en nuestra vida.
Los días siguientes puedes hacerlo cuando encuentres algo nuevo en tu vida que te llena de alegría y te sorprende.
La próxima semana trabajaremos en las cosas que hemos apartado para tirar.
En esta semana vamos a acostumbrarnos a dar gracias por todo lo bueno que nos llega y bendecir lo que creemos que es malo.
Al despertarte da gracias por este nuevo día. Tómate un momento para ver todas las bendiciones que tienes. Salud, tu familia, una casa, alimentos, agua, trabajo, etc.
Cuando te pongas los zapatos, da gracias por ellos, cuando te vistas, da gracias, en cada acción del día da gracias por todo lo que utilizas y que ha llegado a ti para un fin. En el momento que te acuerdes, da gracias. Así tomaremos conciencia de todo lo bueno que nos llega en un día. De que poseemos muchas cosas que nos ayudan a que nuestra vida sea agradable.
Si por alguna razón te llega algún contratiempo, bendícelo y pide ver qué tienes que aprender de esa situación. Da gracias por la iluminación que te llegue.
Por lo general, si estamos en armonía, no nos llegan cosas negativas, así es que procura siempre mantener el estado de ánimo alegre y positivo.
Al ir a dormir, agradece a Dios nuevamente por todos los beneficios recibidos ese día.
El primer día que hagas este ejercicio, procura hacerlo constantemente. Muchas veces ya estamos acostumbrados a las cosas y no nos maravillamos de que nos llegan. Al dar gracias empezamos a tomar conciencia de que hay muchas y abundantes cosas bellas en nuestra vida.
Los días siguientes puedes hacerlo cuando encuentres algo nuevo en tu vida que te llena de alegría y te sorprende.
La próxima semana trabajaremos en las cosas que hemos apartado para tirar.
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