Anteriormente, no me había sentido atraída por la cultura maya; hasta que cayó en mis manos el libro Las Profesías Mayas en el que Adrián G. Gilbert y Maurice M. Cotterellhacen un minucioso estudio de ésta.

Esta información fue vital para conocer las medidas exactas de las eras -o soles, como ellos lo denominaban-. Estos soles eran ciclos de tiempo de duración aproximada de 5 mil 125 años, tiempo en el que se daban cambios en los ejes de la tierra. El último sol (el quinto y actual) comenzó, según la cuenta maya en el año 3114 a.C. y concluirá en diciembre de 2012.
Muchas personas creerían que esto significa que el mundo se acabará. Sin embargo, es solamente una fase más por la que la tierra tiene que pasar. Es un cambio de conciencia el que debemos alcanzar para poder estar afines con dicho cambio. Actulamente, la vibración del ser humano es muy baja para soportarlo, sin embargo, aun estamos a tiempo para lograr la ascensión. Esto es, que nuestra vibración energética se eleve al nivel de la quinta dimensión. Ello significa, que todos nuestros pensamientos deben ser positivos, ya que los negativos nos llevaría a la destrucción. ¿Por qué? Simple, en la quinta dimensión todos nuestros deseos se cumplen de inmediato. Si uno deseara mal en la quinta dimensión, ese pensamiento se cumpliría enseguida y regresaría de inmediato a nosotros.
Esto no es nuevo, ya que actualmente también tenemos esta facultad, lo único es que tarda un poco más. ¿Nunca les ha pasado que piensan en algo o alguien y de repente aparece? pues es lo mismo, pero a una velocidad mayor.
Para comprender mejor lo anterior, dedicaré un capítulo a la Ley de Causa y Efecto...
El tema es demasiado extenso y complejo como para resumirlo en unas cuantas palabras, por lo que los invito a leer Las Profecías Mayas de Adrián G. Gilbert y Maurice M. Cotterell
(*) Fotogtrafías: http://www.humnet.ucla.edu
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